Madrid, Galicia y Asturias

¡Comienza tu viaje! Si llegas temprano a Madrid, puedes empezar a explorar la ciudad, aunque siempre se puede comenzar con una toma de contacto: un paseo y una cena son una manera excelente de abrir boca.

El mayor atractivo turístico de Madrid se concentra en el Triángulo del Arte, tres museos de nivel internacional repartidos en apenas un kilómetro: el Museo del Prado, el Museo Thyssen-Bornemisza y el Museo Reina Sofía. Si tienes que elegir, el Prado ofrece una espectacular colección de arte clásico, mientras que el Reina Sofía hará las delicias de quien prefiera el arte contemporáneo. A mediodía, te puedes acercar al Barrio de Las Letras y tomar algo en alguno de los bares de la calle Huertas o la Plaza de Santa Ana. Vuelve después a la Puerta del Sol y recorre la Gran Vía, la gran calle comercial de la ciudad, convertida ahora en el centro de los grandes teatros y musicales. Termina la tarde subiendo la calle Fuencarral hasta los barrios de Malasaña o Chueca, dos de los más animados de Madrid para alargar la noche.

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TRAYECTO  Madrid (Estacion Sur) - Santiago

Un buen plan para una tarde en Santiago de Compostela es acercarse a la Ciudad de la Cultura de Galicia, un moderno complejo de edificios que agrupa varias infraestructuras culturales, desde museos hasta un auditorio, por lo que siempre ofrece exposiciones y actividades interesantes. Si prefieres estar más cerca de la naturaleza, el parque de San Domingos de Bonaval es un entorno estupendo que, además, linda con el Museo del Pueblo gallego y el Centro de Arte Contemporáneo. Y para contemplar las mejores vistas de la ciudad, el parque de la Alameda. Cuando caiga la noche, es un placer pasear por el centro de Santiago, mientras alternas vinos y tapas.

Santiago de Compostela lleva recibiendo visitantes desde hace más de diez siglos y casi todos ellos entran en la ciudad por la Puerta do Camiño: miles de peregrinos la cruzan cada año, así que es un buen punto de partida para empezar el día. Después, hay que dejarse deslumbrar por la Plaza del Obradoiro, el centro neurálgico de la ciudad, con la espectacular fachada barroca de la Catedral de Santiago. El templo es una maravilla del románico; si puedes, entra a las 12.00 para ver la misa del Peregrino, cuando el gran botafumeiro oscila de lado a lado de la nave central. Cuando salgas, acércate a otra puerta: la Porta Faxeira, que separa la ciudad medieval de la zona moderna, tienes una de las mejores vistas de Santiago si caminas hacia arriba por el parque colindante. Ya por la tarde, asómate al singular mercado de Abastos, donde podrás descubrir la enorme variedad de los productos culinarios típicos de Galicia. Para lo noche, te proponemos un rally alternativo: la famosa ruta del París-Dakar consiste en recorrer los cerca de 30 bares que se suceden en apenas 200 metros de la rúa do Franco, parando a degustar en cada uno de ellos una copa de Ribeiro, desde el bar París hasta el bar Dakar.

La mañana en Santiago de Compostela ofrece los rincones ocultos del centro histórico y una cita en la Catedral: si no has contemplado el baile del botafumeiro, debes asistir a la misa del Peregrino, justo al mediodía. O puedes pasar la mañana saltando de puesto en puesto en el Mercado de Abastos.

TRAYECTO  Santiago - Gijon

Llegada a Gijon. Una vez alojado, puedes salir a disfrutar de la ciudad desde el primer instante o, simplemente, relajarte y reponer fuerzas.

La mejor opción para conocer Gijón es perderse por el barrio de Cimadevilla: disfrutar de la sidra, admirar las antiguas Termas Romanas o subir a la Torre del Reloj, con una fantástica vista de todo barrio. Cuando salgas del centro, acércate a la antigua Universidad Laboral de Gijón, reconvertida en uno de los centros de arte vanguardista más importantes de España. Y a tan solo media hora en autobús tienes la otra gran ciudad asturiana: Oviedo no tiene mar, pero a cambio ofrece arte, arquitectura y un encanto insuperable

La región de Asturias ofrece al viajero varias maravillas muy cerca de Gijón, aunque será necesario alquilar un coche. Si te animas, puedes ir hacia el este hasta Llanes y Ribadesella, siguiendo la espectacular costa cantábrica y parando en alguna de las calas que se esconden entre los acantilados. Si quieres hacer un viaje más largo, merece la pena volverse hacia el interior de Asturias, llegando hasta Cangas de Onis, Covadonga y los Lagos: la cordillera de los Picos de Europa tiene alguna de las montañas más espectaculares del país. Una excursión alternativa es acercarse a Oviedo, a solo media hora en autobús. Y si prefieres quedarte en Gijón, aprovecha para disfrutar de la playa de San Lorenzo y descubrir otros rincones de interés: la plaza del Marqués, los jardines de Begoña, el Museo del Ferrocarril o el Jardín Botánico.

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TRAYECTO  Gijon - Madrid (Estacion Sur)

Una tarde en Madrid puede servir para recorrer el centro histórico de la ciudad, el barrio de los Austrias, que reúne los principales monumentos de la capital en torno al eje que va de la Puerta del Sol al Palacio Real. Vagabundea por las calles, de la Plaza Mayor a la Catedral de la Almudena, de la calle Arenal al moderno Mercado de San Miguel, de la Ópera a la Plaza de la Villa. Y disfruta del atardecer en la Plaza de Oriente, cuando el sol de poniente pinta de naranja las fachadas. Después, puedes acercarte a tapear con unas cañas en el barrio de La Latina e incluso seguir de fiesta hasta bien entrada la noche.

Llegó el último día de viaje. Si te quedan unas horas antes de marcharte de Madrid, puedes aprovechar para dedicar ese último rato a los rincones pendientes. ¡Aunque siempre puedes relajarte y disfrutar del final del trayecto!